Arroz meloso con carne adobada

Hoy nos toca uno de los platos más queridos de la cocina española, "el arroz". ¡¡Qué rico!!. Pero con alguna variación del arroz clásico.

Es un plato muy sencillo de preparar y jugoso, uno de mis preferidos, como tantos, jajaja...

El arroz es un cereal de los más consumidos en todo el mundo. 

Hay muchas variedades: Arroz de grano largo, de grano medio, de grano corto, arroz silvestre, arroz glutinoso, denominado también arroz dulce o arroz pegajoso, arroz aromático, arroz pigmentado, arroz vaporizado, arroz precocido o rápido...

Nosotros utilizaremos arroz de grano medio o más conocido como "arroz bomba". El más utilizado en la cocina española.


INGREDIENTES PARA DOS PERSONAS

• ARROZ BOMBA 250 G
• CARNE DE CERDO ADOBADA 250 G
• 1/2 CEBOLLA
• 1 PIMIENTO VERDE Y 1/2 ROJO
• 1 ZANAHORIA
• 3 O 4 DIENTES DE AJO
• UN PUERRO
• TOMATE FRITO 2 CUCHARADAS
• PEREJIL
• ACEITE DE OLIVA VIRGEN EXTRA
• SAL
• AZAFRÁN Y PREPARADO DE PAELLA
• CALDO O AGUA
• VINO BLANCO (OPCIONAL)

DIFICULTAD
MEDIA

TIEMPO
UNA HORA Y MEDIA APROX 

  

 PREPARACIÓN

Lo primero que hay que hacer es lavar y cortar las verduras. En una cazuela con aceite pochamos la cebolla, echamos un poco de sal y tapamos para que se haga antes, siempre vigilando que no se queme a fuego medio. Cuando la cebolla esté pochada se añade el puerro, y la misma operación que antes.
 

Cuando el puerro esté blandito se añade el pimiento verde y el rojo, y seguimos tapando. Cuando queremos freír algo no es conveniente poner la tapa, porque se cuece el alimento en vez de freírse, pero en este caso lo que queremos es pochar la verdura, por eso lo tapamos. Una vez que los pimientos estén rehogados echamos la zanahoria en rodajas y seguimos rehogando.

En un mortero echamos un poco de sal y machacamos los dientes de ajo, con un poco de perejil y un chorrito de aceite. Hacemos un majado con todo ello. Se añade al sofrito anterior y rehogamos unos minutos. Es la hora de añadir la carne, rehogándola con el resto de las verduras. Unas hebras de azafrán, que aparte de dar color también le añade sabor a nuestro plato.

Aquí sería el momento de poner el vino blanco si se quiere. Dejar unos minutos que el alcohol se evapore. Una vez evaporado echamos el tomate frito. El tomate si es casero mucho mejor claro, pero no es imprescindible para el guiso. Volvemos a rehogar de nuevo, mezclándolo todo muy bien. Pasados unos segundos podemos ir incorporando el arroz poco a poco, entremezclando con las verduras y la carne. Lo rehogamos antes de echar el agua porque la fina capa de almidón que traen los granos de arroz, al entrar en contacto con una materia grasa caliente (aceite), se dora suavemente formando una película que protege al grano. Este, al entrar en contacto con un medio acuoso (agua, caldo) donde se cocerá, esa capa impedirá que el grano se vuelva pegajoso y quedará más suelto y a la vez le da otro sabor.

Con el mismo recipiente del arroz, lo llenamos, bien puede ser de agua o de caldo de carne. Ya sabemos el doble de agua y un poco más siempre. Removemos y añadimos el preparado de paella, este preparado es una mezcla de especias, (harina de maíz, colorante, sal, ajo deshidratado, pimienta negra, clavo, pimentón y azafrán). Lo descubrí en Mercadona por casualidad, y aunque no estoy muy a favor del colorante y los productos químicos, con esta mezcla un poquito es suficiente. Probamos de sal y si hace falta rectificar se añade lo necesario.  Movemos para mezclar el preparado y la sal.

Dejamos que se vaya haciendo poco a poco, unos 15 minutos más o menos, dependiendo de como nos guste el arroz. 

Retiramos del fuego y dejamos que repose mientras ponemos la mesa. Llega el momento de disfrutar de este arroz que está hecho con mucho cariño.

En mi casa como en las casas de toda España, el Domingo era un día especial. Nos levantábamos, nos preparábamos para ir juntos a la Iglesia, a pasear por el pequeño pueblo, sí pequeño, paseo arriba, paseo abajo y ya está recorrido todo, jajaja, comprar nuestras chuches de la semana y como no, comernos nuestro arroz, podía ser de pollo, marisco, carne, etc...pero siempre arroz.

Me gustaba mucho ese momento del día, porque era de los pocos días de la semana que nos reuníamos a la hora de comer todos juntos; padres, abuela y hermanos. Tengo unos dulces recuerdos de esos domingos entrañables. Ese es mi recuerdo de los Domingos de la infancia y quiero compartirlo con vosotros.

Resumiendo: 

Dedico esta receta a todas esas familias que comparten esos momentos, no hay que olvidarlos nunca ni perder esas buenas y sanas costumbres.

Deseo que os guste mi particular forma de preparar el arroz. Os espero si tenéis alguna pregunta.

¡¡¡Hasta pronto!!!